Entrevista: S. Pereira, M. Aires, J. Mederos, Á. Martínez, A. Falcón, Á. Sosa, Oficial C. Sueldo y Prof. L. Silvera
Por: Jandra Pagani
Somos capaces de reciclar el plástico, el nylon, el vidrio… ¿por qué no reciclar al ser humano? Acaso, la cárcel, ¿es una institución al margen de la sociedad? O, ¿es un reflejo de ella? La educación es un medio certero para progresar, corregir, fortalecer conocimientos, y contar con mejores oportunidades en la vida. El Estado, en primera persona, es quien debe velar para que exista en toda cárcel una correcta educación, permitiendo una mejor reinclusión en la sociedad. Quizá, muchos descrean, piensen que esto es pérdida de tiempo. Pero, pensemos y reflexionemos, ¿la educación no es la principal estrategia para combatir una de las peores expresiones del encierro, la socialización inicua, la cual conduce a la reincidencia?
Liliám – profesora de literatura -, ¿cómo se desarrolla este programa?
Este curso se llama “programa especial de contexto en encierro”, hoy abarca sólo primer ciclo del liceo, el próximo año se sumará bachillerato. Se van realizando módulos por trimestre los cuales van siendo evaluados. Acá, el aula funciona como aula múltiple. De acuerdo como vayan trabajando, se aplican los exámenes. Están como régimen de libres. Los profesores somos como tutores, aunque al ser un grupo tan reducido, damos las clases, además de las tutorías. Se conforman tribunales examinadores donde a veces vienen profesores que no pertenecen al equipo, un poco para que vayan acostumbrándose a dar exámenes con otros profesores. Este programa está para ser instalado en todas las cárceles que ofrezcan condiciones y respuesta de parte de los internos. Secundaria da una certificación por grado aprobado. Se le entrega una constancia, de manera que, al irse en libertad, puedan seguir el liceo. Secundaria es una sola, sean programas especiales, nocturno, diurno…los programas son nacionales.
Carlos Sueldo es el policía que hace de nexo entre los profesores y las autoridades a las que él responde, además de formar parte del equipo. La coordinación es sumamente importante para que las acciones sean efectivas. Diríamos que todas las partes coordinamos, en definitiva, es la parte más importante de éste proyecto. Sueldo es el que habilita todos los encuentros. Por este motivo, hoy, en su día libre, está con nosotros. Por otro lado, estamos los profesores que venimos por secundaria. Se imparten todas las asignaturas curriculares de primer ciclo, igual que en el liceo. La diferencia es que acá es una institución dentro de otra institución.
Carlos, eres una de las partes involucradas que dieron la oportunidad a que los chicos lograsen participar del Concurso de Ficción Radial “La Voz De Sánchez”, y por el cual obtuvieron una mención…
Un día llego a la dirección y el actual Director, José Curbelo, me comenta que había llegado un afiche invitando al concurso de Ficción Radial, en el marco del “Año Sánchez”. Sebastian Pereira, uno de los internos, lo encuentra en biblioteca. Me dice que estaban interesados y es así que, a través de la web, conseguí las bases y se las traje. Así es que, se lo propusieron a la profesora de literatura, Liliám Silvera. Y estos, son hoy los resultados.
Francamente, no estaba enterada de este llamado. Venía a través del MEC, Coordinado por el Sodre y el Programa Laboratorio del Instituto Nacional de Artes Escénicas. Un día llego a dictar la clase y me estaban esperando con las bases. Quedaban únicamente 13 días de plazo para el cierre. Era tan grande su entusiasmo que no pude negarme. Vi que la convocatoria no era para alumnos, era para actores. Pero, me pareció que si ellos estaban dispuestos a trabajar y probar esa experiencia, era bueno hacerlo. Era ficción radial el llamado, una propuesta de reflotar el antiguo radio teatro. Y bueno… sobre la marcha formulé. Nos pusimos a trabajar sobre la vida y obra de F. Sánchez, después, les conté el argumento de “En familia” y les gustó. A la clase siguiente les traje copias de la obra, la leímos toda y, siguiendo las pautas de las bases, armamos una escena en espejo trayendo a la actualidad el argumento. Después grabamos eso y gran parte del acto I. le agregamos música, la cual ellos fueron los responsables de seleccionar, en coordinación con el profesor Edgardo Pruso, de música. Finalmente, en la madrugada del día que cerraba el concurso, enviamos bajo el seudónimo Libres. La obra lleva por título “Lasciate ogni speranza”, que en italiano significa abandonar toda esperanza. Según Dante, es la última frase que está escrita en la puerta del infierno. Uno de los personajes de “En familia”, la retoma, refiriéndose a la falta de esperanzas de esa clase media a la que ellos pertenecían, la cual venía cayendo.
Según tengo entendido, las bases determinaban un único premio…
El jurado leyó y escucho la obra bajo el seudónimo Libres. Les gustó nuestro trabajo y sintieron que merecía un destaque, decidiendo dar una mención especial. Recién cuando abren el sobre, donde iban todos los datos, se encontraron que provenía de la cárcel de Paysandú. A raíz de esto se va a montar una usina de cultura que tiene un costo de U$S 50.000, en la cárcel. A partir de esta experiencia, entendieron lo que es apostar a la inclusión a la educación pública y, de esta manera, ofrecer oportunidades para aquellos que tienen ganas, como lo han demostrado ellos. Por éste concurso, mereció que fueran autorizados por los jueces de las respectivas causas a viajar a Montevideo, e ir al auditorio Nelly Goitiño, donde se realizó la ceremonia. Para nosotros, los profesores, son alumnos en iguales condiciones que otros. Es un placer venir y trabajar, se ha formado un grupo interesantísimo.
Sebastian, ¿cómo recibieron la noticia de la mención a su trabajo?
Me sentí muy contento cuando Liliám nos dio la noticia. Y, más aún, cuando supe que fue sin saber que éramos reclusos. En algún momento le dije a la profesora que tal vez podrían reconocernos, ya que nunca habíamos participado en algo similar. Pero, en realidad, les gustó la obra. Me gustó mucho esto que hicimos, a pesar que no teníamos experiencia. Trabajamos mucho y los profesores, en algunas oportunidades, nos cedieron sus horas para los ensayos.
María, ¿cómo viviste esa experiencia?
Fue una linda experiencia, además, nunca había viajado a ningún lado y, tampoco, había tenido esta posibilidad en la cárcel. Del grupo, fuimos dos, un compañero, Marcelo Coria, y yo, acompañados por el oficial Sueldo. La profesora nos esperaba allá. Estuvo muy linda la ceremonia, también habían profesores de otras cárceles.
¿De aquí en más?
Seguir trabajando. Ahora estoy cursando materias de 2º y 3º. Cuando salga voy a seguir estudiando, aunque estoy segura que, cuando obtenga la libertad, voy a tener todo el liceo aprobado. Así que, pienso hacer algún curso corto.
Sebastian, asimismo obtuvieron el 1er. Premio en la Feria Departamental de Clubes de Ciencia y también fueron a Atlántida a la Feria Nacional…
Si. En Atlántida obtuvimos el máximo de menciones. El jurado nos felicitó y nos dijo que estuvimos a seis puntos del premio especial. Es que nosotros tenemos las técnicas, el proyecto…pero, no fabricamos nada. Sólo llevamos la placa, de lo contrario hubiéramos estado más cerca. Con decirte que la primera prensa que utilizamos fueron libros de la biblioteca, luego nos prestaron una. Con la cáscara de maní desarrollamos varios experimentos, hasta lograr un compensado flexible. Permite que sea utilizado como separadores, estanterías…con este proyecto vamos a seguir trabajando. A consecuencia de nuestra mención en el Sodre, la cárcel de Tacuarembó, ahora, incluyó primaria y secundaria, que antes no lo tenía. Nos sentimos reconfortados de saber que fuimos parte inspiradora.
Tus proyectos futuros…
Tengo varias propuestas laborales. Entre ellas: ayer me llamó mi madrina, que es periodista de prensa argentina y, me dijo que tiene trabajo para mí en una FM de Colón. Así que, hasta no obtener mi espacio de románticos en la noche, no paro –risas-.
Si bien Sebastian Pereira y María Aires fueron los voceros del grupo, también, cabe destacar que en esta nota estuvieron conversando con nosotros: Johnatan Mederos, quien llegó en febrero desde Canelones, transferido por buena conducta, nos dijo que cuando termine el liceo, a través del Centro Nacional de rehabilitación, va a concurrir a la Universidad; Álvaro Martínez, hace tres meses que está en la cárcel, está cursando 2º año, dice que le gustó mucho estudiar, piensa seguir, y terminar, el liceo; Álvaro Sosa, cursa 1er. Año, cuando llegó el grupo ya estaba trabajando con el proyecto del maní, se sumó apoyando y ayudando, fue el responsable de armar el panel; Alejandro Falcón, dijo, hace poco estoy en el grupo, pienso seguir estudiando, estas actividades creativas me gustaron mucho…
La educación, afirmaba Varela, como la luz del sol puede y debe llegar a todos sin que se empañe su fulgor ni se aminore su intensidad. La educación, agregamos nosotros, debe estar presente en todas las cárceles, procurando un verdadero cambio y otorgando posibilidades concretas de un futuro mejor.
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