El
día Miércoles 13 del corriente a la hora 18 estaremos presentando el libro “GUYUNUSA,
UNA MUJER CHARRÚA” de Guillermo Bertullo
Santillán, en el salón de actos del Instituto de Formación Docente de
Paysandú. Organiza Comisión de la Biblioteca y Dirección del Instituto de
Formación Docente.
Miércoles 13 de Marzo
Hora 18
Salón
de actos del Instituto de Formación Docente de Paysandú
PRÓLOGO
Me gusta. Cuando se me pidió que hiciera una introducción sobre este libro sentí muchas sensaciones que quizás por deformación profesional me abrumaron mientras lo
leía. Como para pensar a la distancia sobre como pudo vivir mil peripecias una
niña, mujer y guerrera charrúa cuyo nombre reúne muchas mas habilidades
y atributos de los que en forma ínfima pudimos comprender en el aula
cuando escuchamos por primera vez el nombre de esta mujer GUYUNUSA.
Es entonces que pensé e intenté imaginar el rol de esa mujer en tiempos
de caos y de profundas diferencias. Obviamente diferencias sostenidas no solo
desde el poder reinante y tambaleante según girara la rueda de la
historia, a lo que le agregaría otra variable tan o más fuerte como es
el desbalance de poder entre los habitantes de la época, vale decir ser
mujer e indígena. Desde este ángulo de análisis o sea desde una perspectiva
de género GUYUNUSA estaba dentro del grupo social más vulnerable sin
duda en esos tiempos.
A lo largo de su vida y quizás mucho más cercano a su adolescencia cuantas veces se habrá
enfrentado a distintas presiones y violencias que con sus herramientas y
recursos personales debió sortear. Ahora bien el destino además le
deparó la posibilidad de conocer un mundo nuevo que no habían pedido
conocer, que era producto de una larga invasión de desconocidos olores,
comidas y formas de ser, nunca está de más aprender, pero que difícil habrá
sido convivir y a la vez integrar una hermosa y rebelde carga genética con quienes
invadieron la segura y reconocida realidad de su pueblo.
Hoy diríamos que la fuerza interior de GUYUNUSA fue la que le permitió avanzar en ese mundo
hostil, una lanza diferente llamada resiliencia emergió vibrante y en su
máximo esplendor. Esa capacidad de volver a ser y poder valorar la
experiencia vital transformando el dolor en un sentimiento de saber que se
puede superar una o muchas experiencias traumáticas.
Cuantas veces pudo haberse sentido confundida, cuando en alguna etapa de su desarrollo
evolutivo, hayan aparecido en su camino sentimientos contradictorios que
alteraran su percepción del mundo, des
de el amor, al odio o simplemente el deseo de conocer, quien no hubiera dado todo por
cambiar su vida. Eso
si siempre con la posibilidad de elegir, que no parece ser el designio de la vida de
GUYUNUSA.
Un día ni siquiera pudo vivir la angustia y soledad de una existencia complicada y no
deseada. El mundo era diferente muy diferente al que sus adultos referentes le
contaron que habían vivido por muchos años.
Quizás añoraba la vida no vivida de su pueblo, el destino se la llevó mucho más lejos y apareció la segunda soledad cruzando un mar más grande que los mares que
conoció.
Una vez allí la guerrera, mujer y niña descubrió en sus entrañas que la historia de su
pueblo, nunca moriría, que perduraría en el sueño de las tierras ancestrales
donde todo era conocido y claro, donde las reglas las asumían libres de
espíritu acompañados de su madre naturaleza.
En definitiva repasar la vida de una mujer charrúa que es parte de nuestra historia,
nos permite revivir tiempos de alegría y de dolor, de días del principio
de los tiempos de nuestra patria.
Analizar la energía de esa mujer a través de la pluma del autor de este libro, pudo, nos
permite rescatar los valores de esa guerrera, que a veces se esconde que
a veces lucha. Al punto que en su descendencia segura
mente se instaló la fuerza del sentimiento de libertad de una nueva nación.
Por último la resiliencia de esta mujer es sinónimo de lucha, de la búsqueda interior
de las raíces del pueblo Charrúa que vuelve a vivir en el título y contenido de
la presente obra.
Pudiendo cada uno de nosotros sentir que podemos alimentarnos de la sabia de esa raíz
Salud también a Micaela.
Robert Silvio PARRADO
Psicólogo
Lic.en Seguridad Pública