La Radio del Gato

jueves, 11 de noviembre de 2010

SNAKE - Cumple 15 años / Viernes 12 de Noviembre en LOTUS‏

La banda cumple 15 años y como en los verdaderos cumpleaños no se cobran entrada, este Viernes 12 de Noviembre en LOTUS invita SNAKE.

El próximo viernes comenzarán los festejos de los 15 años de Snake
y la banda quiere compartirlo con un show gratuito para todos sus amigos, seguidores e integrantes de su grupo en facebook.Luego de ver a la banda en vivo, se disfrutará de la música del DJ Fede Law, con los temas de las bandas que han influenciado a Snake, con muy buena música toda la noche…
 
Invitado especial en batería: Pablo Martignone.

Importante:
- El ingreso será gratuito hasta la 01 : 30 hs. y sin lista de invitados.
- La Capacidad es limitada.
- Mayores de 18 años.


Facebook : SNAKE SITIO OFICIAL

LA TABARÉ - Viernes 12 de Noviembre en Sala Zitarrosa

Las entradas para esta nueva función ya están a la venta en Red Uts, RedPagos y Palacio de la Música
 
Por entradas agotadas, nueva función en Sala Zitarrosa
Miércoles 24 de Noviembre / 21.00 Hrs

Viernes 12 de Noviembre

Sala Zitarrosa - 21.00 Hrs.

Entradas limitadas en venta en Red Uts, RedPagos y Palacio de la Música


La Tabaré ha festejado durante 2010 sus 25 años de trayectoria.

Desde la primeras presentaciones callejeras en los años 80, la banda ha pisado los más diversos escenarios de Uruguay, Argentina, Brasil, España y Chile.

Ahora llegan una vez más a la Sala Zitarrosa, repasando un repertorio ya clásico que parcialmente estará reflejado en un nuevo disco, "Colección Histórica", un álbum doble recopilatorio de toda su carrera que será publicado antes de fin de año.

El show forma parte del ciclo "Bizarro Año 10" con los que el sello discográfico festeja su primera década.



latabare@latabare.com.uy
www.latabare.com.uy

DES-NUDOS - MUESTRA DEL ARTISTA PLÁSTICO MARIO SARABÍ



 Día: 10 de noviembre
 Hora: 20.30
Lugar: Sala Moliere de Alianza Francesa (Paysandú)
         19 de abril 1024       



Entrevista: Mario Sarabí – artista plástico y escritor
Por: Jandra Pagani Caeiro

“soy la medida de todas las cosas”

El artista plástico sanducero expone el 10 de noviembre, en Sala Moliere de Alianza Francesa, once obras de varios formatos, realizadas en acrílico sobre tela y tabla, titulada “Des-nudos”. Se trata de su primera exposición, creadora, en serie. En una, intimista, charla conversamos de arte y su visión, retrospectiva, a la hora de su creación.

¿Cómo te iniciaste en el Arte?

Creo que no me inicié en el arte. Antes pues, el arte me inició a mí. Mi primer cuento lo escribí a los 8 o 9 años; a los 13 comencé a escribir algunos versos que pretendían ser poesía y a los 17 pinté un autorretrato, aunque dibujaba desde mis primeros años.

¿Quiénes son los maestros de la Historia del Arte con los  que te sientes más identificado?

Son muchos. El Greco, Caravaggio, Van Gogh, Picasso, Egon Schiele, Modigliani. Sáez en Uruguay. Demasiados para enumerar.

Una vez hablabas sobre Van Gogh, ¿qué es lo que encontrás en él?

La búsqueda arrebatada. El mártir de la belleza. El gran pintador. La pasión hasta la muerte, como Cristo.

¿Qué sientes antes de comenzar una pintura, cuando ves la tela en blanco?

Nunca sentí temor ante la tela en blanco o la hoja en blanco. Aunque, en los días que no pinto (o escribo), dudo de si podré volver a hacerlo. ¿Cómo lo hice? Siempre es un viaje nuevo, cada obra. Pero, frente a la espera paciente del blanco, avanzo. También es cierto que me gusta mirar y mirar el vacío, el blanco impoluto, antes de avanzar. Me tomo un tiempo para pintar en la cabeza lo que luego materializo. En la escritura, me gusta crear el pensamiento en la boca, en el teclado, para ser preciso, luego llegará la revisión, claro. No tengo un método, tengo tantos métodos como obras creadas. Pero, eso sí, en los periodos de vaciedad, por suerte cortos, me abstengo.

¿Qué sentís cuando tu Obra está terminada y lista para ser expuesta?

Paz, una profunda paz infantil, y luego lástima. Lástima de saber que eso, que para mí es algo bello, no le importa a nadie.

¿Cuál es el alimento nutricio para tu trabajo?

La angustia, la belleza, la insatisfacción, la duda, la libido. Mi terca condición de humano.

Recorriendo las obras de otros períodos, ¿tus vivencias influyen en la producción de la obra?

Siempre. La obra de un artista es, debe, ser la evidencia de sus vivencias. Aunque “simulen” no parecerse en nada a ellas.

¿Tenés claras tus distintas etapas dentro del arte?

Para mí, en el arte todo es encuentro y necesidad. Mis etapas en el arte equivalen a mis etapas en la vida. Puede que hoy tenga algunas cosas más claras que ayer, y menos que mañana, en lo puramente intelectual; y viceversa, en lo emocional. Cuando era un niño creo que mis sentimientos eran más puros. Pero, mi honestidad, ese único valedero estandarte (si hay alguno), respondió siempre a mi entero capricho. Y mi capricho es: reencontrarme con la concisa claridad de las emociones y sensaciones de mi niñez, en el campo.

Sabemos que los rótulos encorsetan, ¿responde tu arte a modas, a “ismos”? O,  ¿es la fidelidad a tus propias voces,  tu único “ismo”?

Yo soy la medida de todas las cosas. Mi necesidad creativa nace de mi necesidad expresiva, de mi necesidad de respuesta, de mi necesidad. Si yo supiera las respuestas, el destino de mis actos, ya no tendría que ejecutarlos.

Se me ocurre que, hoy, vemos muchas “instalaciones” y “performances” y se habla de “arte digital”. Todo eso parece ajeno a ti, ¿de alguna manera te sientes excluido?

No me siento excluido, simplemente no me interesa lo suficiente. Me parece algo lúdico, un divertimento estético. Yo quiero dialogar con los dioses y, con los dioses, sólo se puede utilizar un lenguaje universal, infinito, eterno, emocional. El puro racionalismo artístico me aburre. La racionalidad del hombre nos ha sucumbido en este meollo apocalíptico. ¿Qué podría tener de bello y honesto el absolutismo racional artístico? La animalidad es inmanente al hombre, ¿Por qué excluirla de su más genuina expresión, el arte?

¿Las instalaciones son pintura, o hay que escuchar a quienes pronostican, de nuevo, como la muerte del arte?

Todos estos esnobismos son seudo manifestaciones artísticas. Cualquier artista plástico que se respete como tal, más allá de realizar alguna instalación, alguna performance, debe pintar, o realizar algún recurso expresivo inherente al hombre. Tenemos registros de la pintura del hombre desde Altamira. El arte es un Fénix, muere con cada obra realizada por la humanidad y nace en la siguiente. Lo efímero quizá no quite lo artístico, quita lo trascendental. La genialidad es trascendental. El artista, aún desde su más rustica obtusidad, debe añorar la utópica rotulación del genio. Quien apuesta a la mediocridad, en cualquier afán u oficio, obtiene la mediocridad.
  
En estos días, paseando por galerías de Montevideo, vi pocas expresiones genuinas de pintura, en realidad más moda que pintura, mientras que para muchos buenos artistas no es fácil exponer. ¿Existe un “establishment” dentro del arte que abre o cierra caminos?

Existe un mundo panfletario y espectacular. Que el tiempo se ocupa de desmentir.

Siento que los medios de comunicación, ya sean gráficos, virtuales, radiales, televisivos… están siendo ocupadas por obras de artistas conceptuales nacionales, que sin lugar a duda son: Javier Abreu, Dani Umpi…, y que a mi entender, carecen de valor artístico, ¿por qué los espacios los ocupan esas personas y no los artistas plásticos que tienen otro valor?

Conozco dos payasos con esos nombres pero ningún artista. Aunque algunos críticos de arte suelen confundir payasada, escándalo, prosaica perturbación, con arte. Lo peor de eso es que algunos críticos determinan que esos ridículos nos representen en Venecia, Cuba, Brasil, etc.  Un bochorno.

Siempre pienso que este suceso es casi imprescindible, como si estuviera, el arte, en una gran crisis, pero que en algún momento va a suceder el quiebre… ¿pensás que se puede romper, y si es que se puede romper, desde dónde?

El arte es babélico. Es una torre de Babel que se construye con convicción y certeza, se derrumba con fiereza y, con esos escombros y algo más, se vuele a construir. Así ad infinitum.


Coincidirás conmigo que todos aplaudimos a los deportistas que triunfan fuera de nuestras fronteras, mientras que a los artistas se les reserva la duda… ¿Es, Uruguay, un país expulsivo?

Repulsivamente expulsivo. Del campo a la ciudad, de la ciudad a la capital de la capital al mundo, y luego, quizá, de vuelta.

Algunos artistas opinan que se debe tener cierta formación para disfrutar de una obra de arte, ¿cuál es tu opinión?

Coincido. Pero no necesariamente una formación académica. Yo nunca estudié música, sin embargo, creo apreciar a Chopin en su justa medida.  

¿Qué diferencias hay entre la formación en las escuelas de arte y los talleres?

Nunca asistí a una escuela de arte, como Bellas Artes. Quizá la diferencia sea que la primera se asienta en la teoría, básicamente, y el segundo en la práctica.

¿Te gusta organizar proyectos que convoquen a otros artistas?

Me gusta, necesito la relación con otros artistas. Crear espacios comparativos, de sana discusión. El individualismo es improductivo.

Este verano Europeo, estuviste exponiendo en España, ¿cómo fue ese camino?

Conocí al artista sanducero, radicado en OGrove, Hugo Bengua. Le gustaron mis pinturas y se llevó varias para exponer en Cambados y en OGrave.


Mario, ¿qué te haría falta para producir mejor como artista y qué pensás que podría hacerle falta al resto de los artistas?, y cuando hablo de artistas no solamente hablo de plásticos, sino de otras áreas también.

El ojo en la pala equivale al ojo en la pluma, decía Rimbaud. Eso es lo que hace falta, que el artista, cuando verdaderamente lo es, cuando haya podido demostrarlo con vocación, con obras, pueda vivir dignamente de su trabajo. Picasso, el más grande artista del siglo, hubiese sido un tercio del Picasso que es si hubiese tenido que trabajar 8 horas en una fábrica para sobrevivir.

Finalmente, el miércoles 10 de noviembre estás presentando una nueva muestra en la sala Moliere de Alianza Francesa, llamada “Des-nudos”. Quien ha recorrido tu obra, ¿se va a encontrar con un Sarabí con más luz?

Se va a encontrar con un Sarabí diferente, eso sí. Ésta, para mí, es la primera muestra que realizo, el resto fueron ensayos. Es una serie, la primera serie claramente reconocible en mi trabajo. Está concebida como serie, y, por ende, como muestra. Hay más luz, son obras engendradas en la belleza, en los tabúes de la libido, en cierto erotismo, quizá. Son 10 desnudos femeninos, pero más allá de la desnudez física, que en la mayoría de los casos no es absoluta, está presentada la desnudez espiritual de la mujer, su personalidad, su presencia, su seducción, su fuerza, su temperamento. Todo lo que hace a una mujer y que, para mí, está más allá de lo meramente corporal. El cuerpo, sin la esencia individual de cada mujer, es simplemente un volumen, una forma, un objeto antropomórfico que podría ser de carne o plástico, daría igual. Antes que pinturas de cuerpos femeninos, son pinturas de mujeres.

martes, 9 de noviembre de 2010

Del último maldito al primer estúpido

Edgar Borges (Desde España. Especial para ARGENPRESS CULTURAL)

En estos días la curiosidad me hizo ver un programa de televisión titulado “Roberto Bolaño, el último maldito”. En todo el documental, como en el título, había un aire de epílogo que me provocó cierta incomodidad. ¿Qué significa el último maldito? ¿Qué representa el malditismo según la lógica televisiva? ¿Será la forma de vida del autor o la complejidad de su obra?

El programa (por ingenuidad o repetición) se suma a la idea de defunción que la industria mercantilista le quiere atribuir a la literatura compleja. Mucho se festeja la libertad de expresión, pero lo que no se admite es la libertad de contenidos (“La política en una obra literaria es un pistoletazo en medio de un concierto, una cosa grosera y a la que, sin embargo, no se puede negar atención…nos vemos obligados a abordar acontecimientos que entran en nuestros terreno, puesto que tienen por terreno el corazón de los personajes”. Stendhal). Para nadie es un secreto que en el entramado comunicacional el pensamiento crítico está prohibido (aunque de vez en cuando se cuele alguna idea); pero muy poco se menciona la creciente imposición de los gustos literarios. La literatura seria (no porque no ría) está viviendo un momento difícil. A mí, por ejemplo, no me gusta la escritura del señor Ken Follett; sus libros y su retórica me saben a nada. Desconfío de la realidad que el sistema capitalista nos impone en clave de sonrisa forzada. Opto por las realidades abismales, las que van al centro del fuego. Y a cada paso que doy el señor mercado me vende al señor Follett (“Odio los héroes vulgares y los sentimientos moderados”. Gustave Flaubert). Esto no fuera problema (y quedaría a criterio de cada quien) si también me permitieran encontrar con la misma facilidad los libros de literatura compleja (la que encierra juego, inventiva; la que dibuja lo bestia y lo sublime de cada ser, de cada perspectiva, y deja posibilidades de participación al lector). Ni hablar si publicaran las obras de tanto escritor que se ve obligado a engavetar sus proyectos o a distribuirlos en Internet (“Al amanecer, armados de una ardiente paciencia, entraremos a las espléndidas ciudades”. Arthur Rimbaud).

Alberto Manguel, en su libro “La ciudad de las palabras”, dice que “Las cadenas de librerías venden el espacio de sus escaparates y mesas al mejor postor, de forma que lo que ve el público es aquello que la editorial paga para que se vea. En consecuencia, pilas de libros que anunciados como best sellers ocupan la mayor parte del espacio físico de la librería y todos ellos, como las salchichas, llevan una fecha de caducidad implícita que garantiza una producción constante”. ¿Se puede considerar demócrata la lógica que describe Manguel? La selva editorial está expulsando de la superficie a la literatura poderosa, reflexiva, incómoda. Como si alguna ley universal hubiese indicado que de la complejidad pasáramos a la resignación (¡la vida es bella aunque el capitalismo nos lo niegue todo!); el mundo se está banalizando tanto que ya existen programas de literatura de autoayuda (y les da miedo hablar de “La metamorfosis”). De seguir así pronto editarán manuales escritos por Paulo Coelho para leer “El Quijote”, “Los Miserables”, “Crimen y Castigo”, “Pedro Páramo” y “Rayuela” (El horror representado en las fotografías y el miedo provocan la pérdida de la conciencia -por eso están como sonámbulos- y de la capacidad intelectiva-están como idiotas”. Roberto Bolaño). Ya sabemos que la pretensión es convencernos (con medio sueldo a cuestas y la historia familiar endeudada) de que vivimos en una sociedad feliz (¡Buenos días mister Follett!), de ahí que no convenga la literatura que mete el dedo en las llagas de la realidad. Pero por favor señores magos del libre mercado, así como decretan el nombre del último maldito, revelen quién fue el primer estúpido que asesinó de conservadurismo la literatura.

MARTINA GADEA presenta "Volvé a Jugar" en España junto al artista ALBERT PLA‏




Martina Gadea realizará la apertura de 5 shows que el artista ALBERT PLA dará en el mes de Noviembre por diferentes ciudades de España.

Viernes 12 Noviembre.
Sala Mundo Caníbal (Cerdanyola del vallès - España)

Sábado 13 de Noviembre
Sala La Vaca - (Ponferrada León - España)

Jueves 18 y Viernes 19 de Noviembre
Sala Galileo (Madrid - España)


Sábado 20 de Noviembre
Sala Circulo de Arte (Toledo - España)  

lunes, 8 de noviembre de 2010

“LA TABARÉ 25 AÑOS EN UNA SOLA NOCHE

Viernes 12 de Noviembre
Sala Zitarrosa - 21.00 Hrs.


Entradas limitadas en venta en Red Uts, RedPagos y Palacio de la Música

La Tabaré ha festejado durante 2010 sus 25 años de trayectoria.

Desde la primeras presentaciones callejeras en los años 80, la banda ha pisado los más diversos escenarios de Uruguay, Argentina, Brasil, España y Chile.

Ahora llegan una vez más a la Sala Zitarrosa, repasando un repertorio ya clásico que parcialmente estará reflejado en un nuevo disco, "Colección Histórica", un álbum doble recopilatorio de toda su carrera que será publicado antes de fin de año.

El show forma parte del ciclo "Bizarro Año 10" con los que el sello discográfico festeja su primera década.

sábado, 6 de noviembre de 2010

ETÉ & LOS PROBLEMS + GENUFLEXOS + DJ HELL END

ETÉ
 &
LOS PROBLEMS 
 
GENUFLEXOS 
 
anima:
DJ HELL END
 



Sabado 06 de Noviembre
00 Hs :: $ 90.00
Café La Diaria :: Soriano 770
 
 
 
- - - - - - - - - -
Management: Leonardo Andres
Cel. 096 172 978




viernes, 5 de noviembre de 2010

Muah Musik el 6 de Noviembre en Kalima‏

Muah Musik
Pop soul rock funk y más

Dos hombres y dos mujeres que se complementan y canalizan sus energías a través de la música...
sensualidad, fuerza, suavidad, furia, encuentro

6 de Nov
21:30 hs
en Kalima
(Durazno y Jackson)
Reservas: tel. 2480 9485

Cubierto artístico: $ 50 por persona

Voz: Cláudia Pires
Guitarra: Agus Canavesi
Bajo: Edu Andreoli
Batería: Lucas Soria 

LAURA Y LOS BRANIGAN :: ALFONSINA Á (acústico)

LAURA Y LOS BRANIGAN 
 
 
ALFONSINA Á (acústico)
 
 
Viernes 05 de Noviembre
Hora: 22.00 Hs. :: $ 90.00
El Tartamudo Café (8 de Octubre 2543)
 
 

Management: Leonardo Andres
leoandress@gmail.com
Cel. 096 172 978

jueves, 4 de noviembre de 2010

La escalada de violencia política que devino en dictadura fascista

El asesinato de Arbelio Ramírez. Crónica de un enigmático crimen que permanece impune

La apócrifa teoría de los dos demonios instituida por el discurso de la derecha política en nuestro Uruguay, ha sido literalmente demolida por las investigaciones históricas serias y objetivas, las cuales confirman que la violencia de inspiración fascista precipitó el autoritarismo.

Por: Hugo Acevedo |Publicado en: http://www.larepublica.com.uy/

En "El asesinato de Arbelio Ramírez: la república a la deriva", el periodista y escritor Víctor L. Bacchetta elabora una concienzuda investigación, destinada a demoler el muro de silencio montado en torno al recordado crimen político.

El 17 de agosto de 1961, el docente Arbelio Ramírez fue ultimado cerca de la sede central de la Universidad de la República, luego de la conferencia dictada por el guerrillero argentino Ernesto "Che" Guevara. El homicidio, que conmovió a la opinión pública de la época, aún permanece impune.

El autor, que en su juventud militó en la Federación de Estudiantes Universitarios del Uruguay, fue miembro fundador del Movimiento de Acción Popular Uruguaya y de los Grupos de Acción Unificadora, en los cuales ejerció responsabilidad de dirección hasta 1977, cuando se alejó de la organización.

En el marco de su carrera periodística, trabajó en los diarios De Frente, Crítica, Democracia y Ya, que fueron censurados y clausurados por el gobierno autoritario encabezado por Jorge Pacheco Areco. Asimismo, también colaboró con los semanarios Marcha, Sur y Respuesta.

Exiliado en 1974, Bacchetta desarrolló su actividad profesional en publicaciones de Buenos Aires, La Habana, México, Río de Janeiro y Santiago de Chile y fue corresponsal en medios de prensa de México, Perú, España, Estados Unidos, Suecia, Suiza y Uruguay.

Su producción literaria incluye, entre otros títulos, "Uruguay: las enseñanzas de la huelga general", "Las historias que cuentan: testimonios para una reflexión inconclusa" y "El fraude de la celulosa".

En este nuevo trabajo, que supuso todo un desafío en materia de indagación periodística, el colega confirma su inclaudicable vocación por la verdad.

Transcurrido casi medio siglo, este homicidio permanece impreso en la memoria colectiva como un episodio confuso y rodeado de una aureola de misterio, a la cual han contribuido las distorsionadas versiones y conjeturas que se entretejieron sobre lo sucedido.

En efecto, la derecha, que ahora aduce que el Frente Amplio pretende construir un nuevo imaginario histórico, durante por lo menos cuatro décadas, detentó la autoría y el monopolio del relato.

Incluso, sus voceros contemporáneos insisten con la insostenible teoría de los dos demonios, atribuyendo a la guerrilla la responsabilidad de la instalación de la dictadura.

Nada más falso que esas afirmaciones en la cuales ya casi nadie cree, si nos remitimos a los documentos y testimonios de comienzos de la década del sesenta del siglo pasado, que confirman la existencia de organizaciones ultraderechistas que operaban con la más absoluta impunidad.

Por entonces, eran frecuentes los atentados contra locales partidarios y sindicales y ataques a militantes del movimiento popular, azuzados por una permanente prédica golpista que, a menudo, partía desde el propio gobierno nacionalista que se inauguró en 1959.

El Consejo Nacional de Gobierno, integrado por blancos y colorados, albergaba en su seno a Benito Nardone, un dirigente ruralista de rápido ascenso, duro e intransigente, que sembraba un odio visceral contra la izquierda y, a menudo, convocaba a los militares a tomar el poder.

Documentos desclasificados del Departamento de Estado norteamericano y de la temible CIA, que han sido consignados en numerosas publicaciones, confirman la vinculación del político con actividades de espionaje.

En ese clima de rechazó, se registró la visita a nuestro Uruguay del guerrillero argentino Ernesto "Che" Guevara, héroe de la revolución cubana, quien llegó para participar en la conferencia del Consejo Interamericano Económico y Social, que se celebró en el hotel Nogaró de Punta del Este.

El asesinato de Arbelio Ramírez, que fue ultimado de un disparo cerca de la sede universitaria donde el "Che" Guevara dictó una conferencia, alimentó diversas especulaciones acerca de un eventual atentado contra el visitante y generó furiosas acusaciones entre grupos pro y anti-castristas.

En un arduo trabajo de investigación, que requirió consultas a archivos policiales y judiciales e incluso a documentos desclasificados de la Embajada de Estados Unidos y de la CIA, el colega descarta ­con un altísimo margen de certeza- que la bala que mató al docente estuviera dirigida a Ernesto Guevara.

La obra se nutre también de múltiples testimonios, que incluyen las versiones de dos hijos del asesinado y del comisario Alejandro Otero, entre otros actores de la época.

Víctor L. Bacchetta elabora inicialmente un completo cuerpo biográfico, destinado a informar quién era realmente el docente e investigador, sus actividades y sus opciones ideológicas.

Aunque las versiones sobre sus adhesiones políticas son contradictorias, queda claro que Ramírez era un idealista, que luchó contra la dictadura de Terra, apoyó la causa de los republicanos españoles y era un simpatizante de la revolución cubana.

Los pronunciamientos partidarios y las notas periodísticas publicadas luego de su muerte, para nada despejan las dudas sobre sus ideas y compromisos.

El colega, que reconstruye minuciosamente la tragedia mediante información extractada del expediente judicial y las versiones de prensa, corrobora que no existió voluntad real de esclarecer el caso por parte de las autoridades policiales capitalinas, encabezadas en esa época por Mario Aguerrondo, un militar y católico ultra-derechista que fue candidato presidencial por el Partido Nacional, fundador de la Logia Tenientes de Artigas y adherente al golpe de Estado de 1973.

El fiscal de crimen que clausuró la causa, Fernando Bayardo Bengoa, fue luego Ministro de Justicia del gobierno autoritario, un dato sin dudas muy relevante para el análisis y la reflexión.

El colega inscribe su vasta indagatoria en un contexto histórico que resulta revelador, pautado por los coletazos de la guerra fría, la escalada represiva de la derecha que devino doce años después en la ruptura institucional, la impune actividad de las organizaciones neofascistas y las operaciones encubiertas de los servicios secretos norteamericano y soviético en nuestro país.

En ese contexto, el trabajo incluye varias hipótesis sobre la tragedia, que discurren entre el asesinato político perpetrado por una organización ultraderechista con el apoyo logístico de la CIA, las intrigas del KGB ruso y hasta un crimen pasional.

Con un formato bien periodístico pero no exento de explícitas reflexiones, el avezado periodista analiza todos los ángulos de un tema que, casi cincuenta años después, sigue siendo altamente controvertido y admite bastante más de una lectura.

Más allá del episodio en sí mismo, los testimonios incluidos en este trabajo coadyuvan a reconstruir el polarizado escenario de tensiones políticas imperantes en la época, que, de algún modo, anticipaban los tiempos más oscuros de nuestra historia reciente.

Esta es una obra muy bien documentada, que visualiza claramente el dramático descaecimiento de la democracia uruguaya y la creciente represión contra el movimiento popular, en un país que comenzaba a hundirse inexorablemente.

"El asesinato de Arbelio Ramírez" es un libro singularmente esclarecedor, que reubica determinados acontecimientos y conceptos, coadyuva a superar las fracturas de la memoria colectiva y demuele buena parte de la mentira institucionalizada por el discurso de la clase dominante que, durante décadas, distorsionó grotescamente la verdad histórica.

martes, 2 de noviembre de 2010

MONICA NAVARRO en Vivo - Viernes 5 y Sábado 6 de Noviembre‏


Viernes 5 y Sábado 6 de Noviembre
Espacio Guambia 22:00 Hrs.

Entradas limitadas en venta en Red Uts, RedPagos y Palacio de la Música

Después del ciclo de presentaciones en el Galpón y de su show en Buenos Aires, Mónica Navarro vuelve a Montevideo.

Esta vez un espectáculo bien cercano al público, presentando las canciones de PERRA, su más reciente disco, junto a otro temas de su repertorio.

Los shows forman parte del ciclo "Bizarro Año 10" con los que el sello discográfico festeja su primera década.
 

lunes, 1 de noviembre de 2010

11a. Fiesta del Inmigrante en Salto del 6 al 14 de noviembre 2010‏

Democracias virtuales

Por: Jorge Majfud (Desde Jacksonville University, Estados Unidos. Especial para ARGENPRESS CULTURAL)

Creo que si miramos a la historia podemos hacer un esquema básico sobre los cambios referidos a la lectoescritura.

I) Era oral (Paleolítico y Mesolítico). Una etapa donde el soporte principal era la comunicación oral y los hábitos intelectuales, aparte del desarrollo de las habilidades practicas, era la mitología, el presente perpetuo y la percepción del tiempo circular.
II) Era de la escritura. Aquí podríamos dividirlo en: (a) una etapa donde surge la escritura (Mesolítico tardío) en sus diversos soportes y alcanza su madurez primero con los textos religiosos de Oriente Medio (la aparición del pasado concreto y percepción del tiempo lineal y fatal) y más tarde con los filósofos de la Grecia clásica; (b) la popularización a partir del siglo XV de la lectura en libros y diarios hasta fines del siglo XX.
III) Era digital. La popularización de la escritura en detrimento de la lectura. La cultura de la urgencia, la inmediatez y la fragmentación.

Esta última etapa (III), que en cierto aspecto significa el renacimiento de la palabra escrita (II), es, en el fondo, el renacimiento de la primera etapa (I), desde el momento en que la escritura se confunde con los hábitos de la oralidad y el presente resurge sobre el prestigio del pasado como fuente de conocimiento y valoración.

Básicamente, la escritura no ha cambiado con el pasaje de una máquina de escribir Underwood a un ordenador. Se ha vuelto más simple. Es más fácil corregir, ya no es necesario reescribir páginas enteras por causa de un simple error. Ya no estamos tentados a dejar un error de estilo impune por simple pereza o cansancio. Es más fácil abusar de lo que Eduardo Galeano llama “la inflación de las palabras”.

En mi experiencia personal, debo reconocer que escribir para medios impresos es más difícil y más didáctico que hacerlo para un medio digital que no impone límites de palabras. Desde hace más de diez años mi lucha no es con la hoja en blanco sino con el recorte. Debido a las limitaciones de espacio, sea porque el soporte en papel impone un límite o porque los diarios impresos son los únicos que se cuidan de no abusar del lector, normalmente debo consumir una o dos horas de mi tiempo libre para llevar a mil palabras lo que en media hora me llevó el primer borrador de dos o tres mil palabras. Este ejercicio molesto enseña, si no a escribir al menos a respetar la literatura de ensayo periodístico o de ensayo breve, de ensayo no académico. Tal vez los nuevos medios digitales debieran conservar el simple hábito, ya que no la necesidad, de imponer límites en la cantidad, así como algunos peer review (publicaciones arbitradas) ponen límites en la calidad.

En el mundo digital los tsunamis de palabras opacan la brillante tarea de aquellos trabajadores de las palabras y las ideas que tratan de tomarse algo en serio. Así he visto surgir y hundirse en el cansancio y el desestímulo excelentes proyectos. Unos pocos resisten, reman como pueden, muchas veces con el único aliento de sus creadores. Lo que persiste es la contradictoria marea de las palabras sin límites o de la hiperfragmentación. A la larga, las dos cabezas del mismo monstruo inflacionario y banal.

Para los escritores de vocación, básicamente la escritura no ha cambiado en la era digital. Sospecho que en su gran mayoría todavía escriben sus primeras ideas con un bolígrafo.

Los cambios más dramáticos están en la lectura. Incluso los cambios más importantes en los hábitos y en las habilidades de escritura proceden de los cambios en los hábitos y en las habilidades de lectura.

En el mundo digital la lectura de “largo aliento” es rara o por lo menos mucho más rara de lo que era en la cultura del libro impreso. A veces es una lectura menos obediente y otras veces es una lectura esclava de falsas urgencias de negación a través de la respuesta propia que, estimulada o protegida por el anonimato, la brevedad y la fragmentación, solo sirve como recurso catártico de lo peor que se encuentra depositado en el alma humana.

Una reciente investigación de la Universidad Normal de Pekín sugiere que los hablantes de distintos idiomas usan partes diferentes del cerebro. De manera semejante podemos entender que distintos hábitos de lectura y de escritura utilizan distintas partes del cerebro. Voy a repetirme: existe un peligro latente en ciertas particularidades de la cultura digital, como lo es la supersticiosa sustitución de la cultura de la lectura de largo aliento por la cultura de la hiperfragmentación.

La crítica contra la “cultura del libro tradicional”, como si se tratase de una crítica al uso de la máquina a vapor, no solo es infundada sino que es sospechosamente autocomplaciente. Si la máquina a vapor pudiese recorrer mil kilómetros sin reabastecerse y sin contaminar y los modernos trenes fuesen incapaces de la mitad, hoy seguiríamos usando máquinas a vapor.

El punto es que hoy en día los lectores amateurs de largo aliento son una rareza. Al menos que sean lectores de Harry Potter. Lo cual no ayuda mucho, porque con “largo aliento” no me refiero a plantarse en un sillón a leer por dos horas lo mismo (algo totalmente legítimo) sino a tomar el desafío de enfrentarse a una complejidad intelectual que nos exige no sólo atención, no solo conocimiento, sino, sobre todo, entrenamiento intelectual. ¿Qué podemos esperar de un atleta olímpico que se la pasa todo el día jugando al ajedrez o leyendo a Howard Zinn? Como atleta sería un fracaso evidente.

El cerebro también es (como) un músculo que si no se usa se atrofia. Con la ventaja de que con un cerebro entrenado se puede competir en las grandes ligas aún siendo un anciano y con la desventaja de que cuando está atrofiado, por el desuso o por el mal uso, el fracaso no es tan evidente. Sobre todo para el implicado. Razón por la cual cualquiera se considera apto y facultado por el mero recurso de la negación, la obviedad y el insulto que nunca exigen método ni condición pero que siempre dan la confortable ilusión de ser más sabios y más inteligentes que Darwin y Jesucristo juntos.

Los ancianos con una saludable práctica intelectual sufren menos decadencia que aquellos que no la han tenido. ¿Qué podemos esperar cuando las estadísticas nos dicen que los estudiantes de hoy dedican la mitad del tiempo a estudiar que aquellos de los años sesenta? Están demasiado ocupados (absorbidos, chupados) en escribir banalidades en Facebook. El divorcio que existe en la elite de intelectuales de las universidades norteamericanas, islas de premios Nobel, y el resto de la población se está expandiendo al resto del mundo gracias a una cultura y a unos instrumentos que prometían lo contrario.

La twiterización de las habilidades intelectuales, la facebooquización de las emociones puede ser un día un proceso irreversible o puede provocar un efecto inverso al previsto: la democratización de la información y de a in-formación por estos medios y debido a estos hábitos corre el riesgo de llevarnos a una aristocratización aun mayor de la formación intelectual y, por ende, de los órdenes sociales.

Traductor